En nuestro proyecto los espacios educativos se encuentran acondicionados para las diferentes actividades y los niños los utilizan todos en el curso de la semana.

En el acondicionamiento de las salas, se toma en cuenta la actividad que en ella realizan los niños y en función de esa realidad se determina el tipo de mobiliario, los materiales, el tamaño más adecuado para el desplazamiento de los niños, entre otros factores.

Buscamos que los espacios estén en función de la actividad y no la actividad en función del espacio, optimizando el trabajo de los docentes y los niños

Consideramos que la arquitectura escolar habitual, basada en los salones de clase como espacios privilegiados, en los cuales la permanencia de los niños y docentes representa más del 80% de su tiempo escolar, compartimenta y aísla reduciendo las experiencias comunes, tanto entre los niños como entre los maestros, hecho que empobrece los vínculos.

Nuestro equipo docente está especializado en las áreas de ciencias, lenguaje, circo, plástica, educación física, expresión teatral, huerta, inglés, ajedrez y música.
Una maestra coordinadora recibe a los niños y sus familias a la hora de entrada, permanece todo el horario en el Jardín y despide a los niños y sus familias finalizado el turno. Su rol es establecer un vínculo diario y permanente entre los niños, el equipo docente, las familias y la dirección.
La personalización y la facilitación de aprendizaje constituyen el fundamento de la labor docente, la cual se basa en el afecto, la seguridad, la confianza y el respeto por los tiempos y particularidades de cada niño.
El equipo docente busca asegurar una visión polifacética con respecto a la valoración de cada niño.
Siendo diversas las miradas, diversos son los aspectos que se toman en cuenta a la hora de estimular y evaluar al niño, evitando que determinados aspectos de su personalidad y determinadas capacidades pasen desapercibidas.